Monday, June 10, 2013

¿Profesor o maestro? Un mito para diferenciarlo..

Un crucero en medio del atlántico se quedó sin motores. El capitán agotó todos los procedimientos hasta que agotó las baterías y se quedó incomunicado y a deriva. Un anciano se presentó con él y afirmó poder repararlo, por una "módica suma" de un millón de dólares. Conocedor de las consecuencias de un accidente, aceptó el capitán de inmediato. Bajó el misterioso pasajero a cuarto de máquinas, escuchó... escuchó... escuchó.. y pidió un martillo pequeño. Golpeó una válvula delicadamente y al instante el enooorme motor diesel revivió y con éste el barco. Se volteó hacia el capitán y pidió su cheque. "!¿Un millón por un golpecito de martillo?!" A lo cual el octagenario (que resultó ser un maquinista naval retirado) "No te cobro el golpe, sino saber dónde golpear..."


Nota1 Los mitos (narraciones plásticas con intención didáctica) son mucho más eficaces para aprendizaje de fenómenos complejos (como los exzistenciales) que los rollos teóricos (y mira que me encaaantan los marcos teóricos, por mi de-formación filosfófica)  guiño
Nota2:  El mito no es mío. Sin embargo no recuerdo de dónde me lo robé. Sorry.